Lo siento.

Un día haré como Earl, confeccionaré una lista que contenga todos mis perdones. ¿Os imagináis que además salgo a pedirlos?

Audiencia imaginaria. Tengo doce años, y soy más niña que todas las niñas que conocía; más mujer que casi todas las niñas que conocía. Porque no tocaba, pero tocó. 

Se apretó y sentí el aliento. Qué asco, qué innecesario, qué extraño el deseo de lo que consideras asqueroso, pero después de aquello casi me enamoro. En qué lugar me deja eso. Si lo viera ahora le partiría las piernas: aunque seas un niño preadolescente eso no se hace a una niña tardía. Luego me fui a llorar al baño y no se lo quise contar a mamá. 

Nunca le quiero contar nada, porque contar algo supone decirlo en voz alta, y eso supone decirlo en voz baja, lo que supone pensarlo, para lo que hay que asumirlo, lo cual quiere decir poner cada elemento en su sitio y así construir algo coherente y entendible, lo que significa tener los ojos atentos, y la cabeza, en el momento en el que se dan tales elementos. Hay un eslabón que no alcancé y desde entonces arrastro los restos.

¿Como he conseguido llegar hasta aquí?, ¿soy un fraude.

Cuánto (me) he mentido para salirme con la mía. No se por qué empezaría a hacerlo, o cuándo, pero una vez mi abuela me dijo que era una embustera. Debió ser hace mucho, porque no he tenido muchas conversaciones de verdad con ella.

Nunca he tenido muchas conversaciones de verdad.

Al igual que todos los demás, me digo, pero a ellos parece no importarles, me digo. 

Tiene que importarles. No sé. Ser la sombra de lo que se es, no vayamos alguno a dar la luz y descubrir que estamos solos. Juntos todos, e infinitamente solos.

Tengo que ser buena compañía conmigo si pretendo ser buena compañera para los demás. Si pretendo aún más, de hecho, que mera compañía. Si aspiro a ser descanso. Si aspiro a ser guarda, diplomacia y lucidez.

Si soy huida, ombligo y confusión. 

Y ridícula, que siéndolo o no, lo siento.

Y príncipe que rescata a la par que princesa que espera.

Te desvaneciste cuando fue lo único que no te pedí.

Es mentira, pero queda poético. No me miren así. Sucio pero legítimo para la era en la que se atrevieron a parirnos nuestras madres (a nuestros padres qué les puedo pedir, el proceso exige menos calibraciones). Yo querría haber nacido en otra época (yastá lamelancólica). No porque piense que cualquier tiempo pasado fuera mejor, sino porque a fuerza de falta de formas, ¿pudiera ser que valiera más el fondo?. Antes las mujeres eran(nos) más feas.

Lo siento, no sé ajustarme a un tema. 

Movimientos estereotipados e inatención. Interpretación de las situaciones como hostiles. Las ganas de llevar la contraria inintencionadamente. Lo normal que es eso para mí porque así ha sido siempre. Lo bueno es que me gusta discutir, pero solo cuando soy capaz de que salgan bien las palabras, que el feedback sea perfecto. 
Tengo aún muchas preguntas que hacer y no sé por donde empezarlas.

Los pajaritos cantan, las nubes se levantan, y no me jodas que está amaneciendo.

No voy al justificar el texto, como si fuera APA, no se vaya a perder el tufo psicopatológico que desprende.

A lo mejor es facticio, pero a mí me huele igual de mal.

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